Practiqué la visualización del MANDALA, una y otra vez, mi mente, se concentraba, y divagaba, viajaba a MONGOLIA, perdiendo en si misma el objeto del VACIO.
Había profundizado en el VACIO, ahora miles de imágenes atormentaban mi MENTE, pero mi Maestro, capaz de percibir las enseñanzas de la visualización y trabajo de los MUDRAS, había vaticinado correctamente.
Muchos dudan en España, y ponen en evidencia mis enseñanzas, o mi vida, bien es cierto que nadie es profeta en su tierra...
Recibí una carta, de ULAM BATOR, el Príncipe Davanyam, “EL TIBETANO”, Señor de los Guerreros Mongoles, descendiente directo del Gran Genghis Khan, y máxima autoridad del Shamanismo Mongol, quería abrazarme.
Mi búsqueda de la espiritualidad y del camino del guerrero eran conocidas en aquellas tierras, y me invitaba a permanecer con su pueblo, y de esta forma poder comprender las energías y fuerzas que movían a los guerreros espirituales, capaces de vivir en armonía con el CIELO y la TIERRA.
El propio presidente del Gran Hural de Mongolia, envió un VISA ESPECIAL, e invitación del GOBIERNO MONGOL, A permanecer con ellos el tiempo que fuera necesario.
Las tribus de MONGOLIA, organizaron el NAADAN, para TENGU TETSUJIN – el duende que comprende el camino de la Espada (así me llamaban) -, y de todos los lugares de la Estepa de Mongolia, representaciones de los más importantes guerreros empezaron su peregrinaje hasta la capital, a algunos les llevaría dos meses.
Yo me encontraba verdaderamente confundido... ¿Que sucedía?.
El viaje fue terriblemente complicado, siempre que uno tiene una ilusión,hay fuerzas que vienen en contra, que luchan para que no se de.
Madrid – Berlín – Moscú – Ulam Bator...
Bajé del avión con mi amigo, y antropólogo Aldo Colleoni Von Roerich, nieto del fabuloso Roerich, y heredero de sus escritos. Tocaba suelo de la mítica URGA.
Al bajar con cierto cansancio del avión, nos esperaban dos niños, vestidos a la manera tradicional, con flores, y un cuenco de leche de yegua. Como nómadas daban la bienvenida a un hermano que regresaba a su casa.
Eran los hijos de uno de los más poderosos Chamanes del Gobi, ENKHTSETSEG Purevtseren
Viajamos hasta llegar a la GER (YURTA), en un poblado, allí fui recibido por mi hermano, el Príncipe Davanyam, en una recepción cena, con el relicario, que su antepasado el Khan de Khanes, llevó.
Mis antepasados conquistaron Asia y Europa, nosotros somos guerreros, nadie lo puede negar – iba hablándome – yo te enseñaré a ser un guerrero, a comprender la naturaleza, a vivir en armonía con ella, a sentir la energía que todo lo envuelve. Eres mi hermano “Tatsujin”, siéntate en MI TRONO, y comparte mi amistad; desde ahora eres mi hermano...
CONTINUARÁ.
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