Observando de nuevo las imágenes de Mongolia y Tibet, sus interminables altiplanicies, meta ahora de mis sueños como guerrero; quiero susurrar...
Te buscaré durante mil vidas y diez mil mundos...
Somos hombre y mujer... hijos de un corazón...
Buda, diría, todo es ilusorio; entrenar, comer, meditar, amar... un sueño.... todo es MAYA...
Pero, ¿no creéis que son hermosos los sueños?
Con ellos somos protagonistas de vidas y existencias de nuestra mente...
El débil, es fuerte; el feo, hermoso... lo perdido se recupera.... y los dioses te susurran canciones valientes que inflan tu corazón de guerrero.
Yo sueño con ser discípulo, ya que junto con saber amar, es el arte más difícil del mundo.
Ser discípulo es algo único e incomparable, aprender de un maestro que te guía por sendas desconocidas, abriéndote puertas a lugares inquietantes.
Debes ser sumiso, porque sino lo desconocido no será revelado, se asustará como una mariposa y desaparecerá.
Porque toda búsqueda es pasividad...
Un vientre materno, es pasivo, pero recibe la verdad de la vida, y en ella evoluciona.
Como un feto absorbe los nutrientes de su madre, con pura pasividad, el alumno debe hacer lo mismo, sin preguntar... ¡la verdad nos busca a nosotros!. Como el agua profundiza en el árido suelo, se desliza, y se convierte en un lago, en un estanque de inmensa quietud, en el que ver y observar nuestro reflejo.
Ahí no hay verdades ni mentiras, solo un momento;un aleteo de esa mariposa de REALIDAD, que nos invade de CONCIENCIA.
Es el satori del BUDO; es la apariencia de la VERDAD, pero es un reflejo de lo que es, por que son tus sentidos los que te hacen observar, tu realmente no formas parte del lago, no existes en el, SOLO EXISTES EN TI, y en quien te ama.
Los SECRETOS NO SE PUEDEN PEDIR, ¡¡ HAY QUE GANARLOS !!.
EL AMOR, como la SABIDURÍA, tan diferente al conocimiento. Es... espera silenciosa...
El discípulo es el tiempo, y el Maestro es eternidad... no es en sí el humano con sus defectos y virtudes, al contrario es la esencia del conocimiento que te llevará a la SABIDURÍA.
¡¡ Ay tenemos tanto miedo al AMOR !!
El AMOR VERDADERO, no se puede manipular, con el no puedes tener el control.
El amor no es ciego, es visión clarificadora, porque nos vemos en los ojos del amado, que no devuelve nuestro reflejo de perfección, si no lo que él observa de nosotros... por eso sufrimos, queremos ser TODO en sus ojos... pero no somos dioses, simples hombres y mujeres... que caminamos por este mundo oscuro...
Una vez que tu alma gemela te ha mirado, tu ser interior vibra de una manera diferente, vive en un ritmo diferente. De hecho, ya no eres el mismo: el antiguo ha desaparecido a través de la mirada y un nuevo ser ha cobrado vida...
Has renacido, pero seguramente morirás de nuevo....
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